Me cepillo los dientes, me miro al espejo
Y sonrío radiantemente, de oreja a oreja.
Yo más bien prefiero recoger flores en lugar de peleas,
Y más que lucir mi estilo,
Prefiero mostrarte una sonrisa de dientes limpios y blancos.
Fui al dentista una y mil veces
Así que conozco el taladro.
Aliso mi cabello, tomo asiento en la silla
Pero de algún modo todavía tengo escalofríos.
“Toma asiento” dice él amablemente
Mientras estrecha mi mano y prácticamente se ríe de mí.
“Abre bien grande la boca” dice mirando atentamente,
Y con una sonrisa agrega “No te preocupes,
Será sólo un pequeño pinchazo”, mientras intenta no reírse.
Cuando los higienistas se fueron a unas largas vacaciones,
Ahí fue cuando los dentistas gritaron
Y perdieron la paciencia.
Hablar sólo trae dolor de muelas,
Porque yo digo las cosas más estúpidas.
Así que si mi resultado va hacia el Sur,
Voy a tragarme mi orgullo junto a una Aspirina
Y cerraré la boca.
El golf y el alcohol no se mezclan,
Ese es el porque no bebo y conduzco,
Porque el buen dolor noquea mis dientes
Y tengo que darle un beso de despedida a mi sonrisa.
Fui al dentista una y mil veces
Así que conozco el taladro.
Aliso mi cabello, tomo asiento en la silla
Pero de algún modo todavía tengo escalofríos.