Creo que es necesario poner a dormir esa duda de que si mi discográfica "influenció negativamente" mi nueva música por como suena para algunas personas. Sin faltar el respeto a la opinión de los demás, les puedo asegurar que inclusive es todo lo contrario. Me he quedado fascinado con lo que hace la gente, y aún más, por cómo podría capturar un montón de magia en un pequeño recipiente, dentro de parámetros auto-impuestos. Es difícil de explicar, pero es exactamente la manera en que esas dos cosas tienen la capacidad de coexistir sin inclinar la balanza, va más allá de la inspiración y nunca es suficiente. Eso es la música pop, se los aseguro... ¿pero cómo saber cuál fuente de inspiración es el marco de referencia correcto? Es simplemente la chispa que capturó mi atención en ese momento. Esta puede ser algo más mañana, o alguna cosa completamente diferente en cinco años... todo lo que sé es que jamás estuve tan seguro (ni emocionado) de que la música que estoy lanzando es verdadera y genuina como lo estoy en el presente. Todo depende de cómo se mire. A veces la gente dice "Eso es grandioso... sólo asegúrate de estar siendo fiel contigo mismo", y déjenme contarles algo: nada podría ser más acertado, porque de eso se trata precisamente. Mantenerse fiel a uno mismo. La música evoluciona, y eso está bien.
Siento con frecuencia que los oyentes no tienen la oportunidad de oír los verdaderos pensamientos/sentimientos que saca de su corazón un artista que ellos admiran porque suele ser repentino... ¡Zaz!, un nuevo material, sin explicaciones, que suena diferente a lo hecho anteriormente y la gente no tiene un punto de referencia que la ayude a comprender por qué el artista está tomando las decisiones que está tomando.
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Lo anterior es parte de lo publicado por Adam Young en su Tumblr.
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